Baltasar Garzón asume defensa de Alex Saad en los estrados internacionales
Saad que es pedido en extradición por el gobierno norteamericano pide pista para convertirse en soplón, es decir, colaborar con la justicia de E.E.U.U. Y aquí si estaría Maduro en el filo de la navaja.
El colombiano Alex Saab pretende demandar el proceso de extradición a Estados Unidos y aceptado por Cabo Verde, el país africano donde está detenido en el tribunal internacional de La Haya. El ex juez Baltasar Garzón, quien lo representará en este proceso, se ha especializado en derecho internacional frente a la Corte Penal Internacional. Su caso estrella fue la orden de detención del dictador Augusto Pinochet y últimamente la defensa de Julian Assange, fundador de Wikileaks.
Baltasar Garzón demandará al gobierno de Estados Unidos en cabeza de Donald Trump y al presidente de Cabo Verde Carlos de Almeida por la violación de la la inmunidad jurisdiccional, pues según la defensa de Saab, éste actuaba como enviado especial del presidente Nicolás Maduro en la búsqueda de alimentos y apoyos en el exterior para Venezuela afrontar la crisis del coronavirus.
Garzón, quien dirige actualmente el bufete Ilocad en Madrid, buscará además la indemnización a Alex Saab de USD 5 a 12 millones. El país africano y su presidente estarán igualmente acusados de daños patrimoniales y de imagen en la persona de Alex Saab.
Saab quiere cantar ante el gobierno de Estados unidos para buscar rebaja de pena por lavado de activos.
El barranquillero Álex Saab —capturado en Cabo Verde y en proceso de extradición a Estados Unidos— estaría buscando una colaboración con la justicia de Estados Unidos a cambio de una sustancial reducción de la pena que le espera dentro del proceso que se le sigue en Miami, por lavado de activos superior a los US$ 350 millones, vinculado a la construcción de casas subsidiadas para el régimen de Nicolás Maduro.
La información se produce en momentos en que se vence el plazo para que Saab apele la decisión administrativa de Cabo Verde de enviarlo a Estados Unidos.
La decisión de colaborar se habría producido después de que un enviado de última hora del régimen de Maduro llegara a Cabo Verde para hacer una gestión final pidiendo la liberación del llamado “agente especial” del Gobierno bolivariano.
Esta resultó infructuosa y habría desencadenado el despido de abogados y la oferta de colaboración.
