De grandes aliados a los peores enemigos políticos, pero ambos embriagados y obsesionados por el poder
Que habría provocado la ira de Dios del Cura Hoyos con el empresario y político Fuad Char Abdala.
Como dice el viejo adagio popular “en política nada es cierto pero todo es incierto”, es decir, de las grandes alianzas políticas por el poder, ya sea de índole político o económico, termina obsesionando y cegando a quienes han pretendido perpetuarse en el trono, y en un abrir y cerrar de ojos terminas en el infierno, meditando que estabas en un gran paraíso y hoy no tienes un cielo donde descansar tus pesares y el fracaso de lo que un día fuiste y hoy no eres.
En la foto de portada podemos observar el poder de Dios encarnado en un sacerdote, un teólogo que no era raizal de Barranquilla, pero que su acento paisa se fue diluyendo con el tiempo e instancia en la ciudad de Barranquilla, sin poder político, pero con una fortaleza económica, traemos a colación al Padre Bernardo Hoyos Montoya, conocido popularmente como el ‘Cura Hoyos’ en el bajo mundo donde se movía con toda confianza y sin ningún temor.
Edificó su templo en el ‘Rincón Latino’ en la zona negra de Baranquilla, cuyo entorno era catalogado como lo peor de Barranquilla y sectores de alta peligrosidad por la lucha territorial del flagelo de la droga, pero desde allí fue un observador de quienes toda la vida han ostentado el dominio político y económico en el Distrito de Barranquilla, y les hablo de la familia Char, una de las estructuras económicas de mayor poder en el departamento del Atlántico.
El ‘Cura Hoyos’ ser fue ganando poco a poco la aceptación de los sectores aledaños a su templo divino “El Rincón Latino”, que terminó siendo un epicentro de la clase política local, regional y nacional, logró estudiar muy bien los movimientos del señor Fuad Char Abdala y como iba apropiando del territorio desde la esfera política, porque el poder económico ya lo tenía.
Un día al levantarse logró identificar que al pueblo le gusta que le hablen sin rodeos, sin titubeos y de manera frentera y popular, por lo que diseño un discurso agresivo y con un lenguaje obsceno, logrando penetrar en todos esos sectores que rodeaban al ‘Cura Hoyos’ en un sola dialéctica y fue así como siendo candidato a la alcaldía de Barranquilla, logró conquistar a la clase popular y elegirse alcalde de esta ciudad.
En tales circunstancias el ‘Cura Hoyos’ mantuvo el poder en Barranquilla durante tres periodos eligiendo a los candidatos que el direccionaba sin ningún tipo de contratiempos y aliado al hoy su peor enemigo político Fuad Char Abdala.
Por eso decimos que hoy en día y siempre ha sido así, la política se ha convertido en la obsesión y dominio de quienes ostentan el poder territorial y por ende decimos que la política es incierta, lo que hoy es, mañana ya es historia. En el pasado eran los mejore aliados, pero hoy son los peores enemigos en el ámbito político, donde está Fuad Char Abdala, no está el ‘Cura Hoyos’ y viceversa donde acampa el Cura Hoyos, no llega el verano de Fuad Char Abdala.
La única duda que nos deja esta enseñanza es quien apoyó a quien en la alianza Fuad Char Abdala y Bernardo Hoyos Montoya, en aquellas contiendas políticas y cual habría sido el florero de Llorente entre la estructura política de los Char y el ‘Cura Hoyos’, que ni en el infierno ni en la gloria volverían a hacer política juntos, porque son como el agua y el aceite, no soportan una gota de limón, por eso decimos que la política es incierta, pero también es cierto que en muchos aliados en el actuar político reina la hipocresía, la deslealtad, la traición, el devenir y lucha por ser los más fuertes y dueños del sistema.