El presidente del Salvador Nayib Bukele al igual que otros presidentes de Latinoamérica se han ido en contra del régimen del presidente de Venezuela Nicolás Maduro con la reelección por la argumentación de la oposición derechista al no poder sustentar todavía con las pruebas que habría sido elegido por el Consejo Nacional Electoral de Venezuela de manera fraudulenta cuando aun todavía no ha terminado o mejor iniciado el reconteo de votos y de tal manera publicar las actas de los escrutinios y de esta forma tener claridad de la legitima o ilegitima elección del presidente Nicolás Maduro su tercer mandato constitucional.
El sistema electoral de Venezuela determina con el primer boletín el grabador de la contienda electoral que en este caso correspondió al 80% de la transmisión de los datos de los escrutinios la cual decretó la elección de Nicolás Maduro con el 51.2% de las mesas escrutadas y los datos que arrojó el sistema electoral sobre el 44.5% del caudal lectoral de Edmundo González.
El presidente del Salvador Nayib Bukele, el catón de la moral en el Salvador indica que la elección de Maduro no es real y no se ajusta a los comicios electorales contemplados en las actas y que la duda radica en que el Consejo Nacional Electoral en Venezuela no hizo acotación de los resultados plasmados en las actas de los escrutinios con las cifras que demostraran que Nicolás Maduro fue el ganador y que de esa forma la oposición aceptara los resultados y admitiera su derrota.
Esta incertidumbre es lo que ha permitido que la extrema derecha no solo en Venezuela sino a nivel mundial y países latinoamericanos hayan creado la zozobra que el Consejo Nacional Electoral eligió sistemáticamente a Nicolás Maduro.
Sin lugar a dudas la publicación de las actas de los escrutinios despejará toda duda y habrá certeza del buen y correcto manejo de las elecciones presidenciales en Venezuela, donde hay mucho mayor interés de los países latinoamericanos y europeos que de los propios venezolanos de derrotar a Maduro, pero es claro que la mayor circunstancia de la ultraderecha tanto de Colombia, Brasil, Panamá, Chile, Argentina, entre otros, es la economía que genera el Petróleo en Venezuela, razones de sobra para buscar el poder nacional en la República Bolivariana.
“Se está intentando imponer en Venezuela un golpe de Estado nuevamente de carácter fascista y contrarrevolucionario. Yo pudiera denominarlo una especie de Guaidó 2.0″, dijo Maduro desde la sede del Consejo Nacional Electoral venezolano (CNE), donde ha sido proclamado presidente electo.
