Con gallardía y corazón Colombia venció a Brasil en el Metropolitano: Luis Díaz selló el triunfo
Con una soberbia actuación de Luis Díaz, la selección Colombia derrotó 2-1 a Brasil, por primera vez en la historia de las eliminatorias mundialista. El guajiro anotó dos goles y dejó el alma en la cancha.
Un partido más táctico que futbolístico plantearon Colombia y Brasil para no dar ventajas a los grandes futbolistas con los que cuentan las dos selecciones, pero el esquema planteado por Colombia de esperar a Brasil para contragolpear y generar más espacios de ataque se rompió al comenzar ganando Brasil en los primeros minutos del partido en el primer tiempo y esto obligó a Colombia a salir a buscar el partido y los goles.
Ya con el marcador en contra, Colombia reaccionó. Aparecieron James Rodríguez y Jorge Carrascal, pero sobre todo Luis Díaz. Los tres tuvieron oportunidades de empatar, así como Kevin Castaño, quien intentó dos veces de media distancia. Con buenas asociaciones algunas veces, o en juego largo en otras, el equipo de Néstor Lorenzo exigió al golero Allison.
Eso sí, Brasil no dejó de ser peligroso y siguió inquietando en los contragolpes, pero la defensa tricolor, nerviosa e insegura en el arranque, mejoró y se comportó bien.
Para el complemento el técnico de Colombia mandó a la cancha a Luis Sinisterra y Cristian Borja, para reemplazar a Matheus Uribe y Déiver Machado. Rafael Santos Borré pasó a jugar de nueve, con Lucho Díaz y Sinisterra por los costados, con James y Carrascal. Arriesgo, porque dejó solo a Castaño con la marca en la mitad, lo que casi le cuesta el segundo gol en contra cuando Bruno ganó un rebote al borde del área y remató cerca del vertical izquierdo del arco de Vargas, quien poco después sacó un disparo de Rapinha, que iba para adentro.
Primero fue un centro de Borja desde la izquierda y luego uno de James por la derecha los que aprovechó el jugador del Liverpool para mandar con la cabeza al fondo de la red y desatar la locura en todos los rincones del país.
La victoria fue justa, por la actitud y el despliegue de los jugadores colombianos, todos exhaustos tras el pitazo final. De la mano de Lucho, James y Davinson Sánchez la tricolor hizo historia ante cerca de 50 mil personas, que como es tradición, adelantaron el carnaval en Barranquilla.